Rompiendo el mito: La Biblia no prohíbe el matrimonio interracial
Matthew BellCompartir
Durante generaciones, el tema del matrimonio interracial ha generado debate, incluso en las comunidades cristianas. Lamentablemente, algunos han usado la Biblia para justificar sus prejuicios y preferencias culturales, alegando que Dios está en contra del matrimonio entre personas de diferentes razas. Pero cuando estudiamos la Palabra de Dios con honestidad y en contexto, queda claro que a Dios no le importa la raza ; le importa la fe y la condición del corazón .
La Biblia no condena el matrimonio interracial. De hecho, nos muestra ejemplos de personas de diferentes orígenes étnicos que se unieron bajo el plan de Dios. Lo que Dios realmente desea no es la uniformidad racial, sino la unidad espiritual en Él.
Analicemos lo que dicen las Escrituras, usando la versión King James (KJV) , y expongamos la verdad sobre el matrimonio interracial a los ojos de Dios.
Todos somos una sola sangre en Cristo
Una de las declaraciones más claras sobre la humanidad viene de Hechos 17:26 (RVR1960) :
“Y de una sola sangre ha hecho todo el linaje de los hombres, para que habiten sobre toda la faz de la tierra…”
Este versículo nos dice que todos los seres humanos somos de una misma sangre , lo que significa que todos provenimos del mismo origen: Adán y Eva. A los ojos de Dios, no hay jerarquía de razas . Cada alma humana es igual en valor y dignidad. La división de las personas en razas es un concepto artificial; Dios creó las naciones , no las razas, y ve el corazón, no el color de la piel.
Dios mira el corazón, no la apariencia exterior
En 1 Samuel 16:7 (RVR1960) , Dios le recuerda al profeta Samuel una verdad importante:
“...porque Jehová no mira lo que el hombre mira; pues el hombre mira lo que está delante de sus ojos, pero Jehová mira el corazón.”
Aunque los humanos a menudo nos preocupamos por la apariencia, incluyendo la etnia y la raza, Dios se centra en el carácter y la fe de cada persona. Si Dios no juzga por la apariencia, nosotros tampoco deberíamos hacerlo. El matrimonio interracial solo es un problema para quienes lo ven con ojos humanos, no a través del lente de la Palabra de Dios.
Los versículos del Antiguo Testamento mal utilizados no se refieren a la raza
Algunos señalan el Antiguo Testamento, donde Dios ordenó a los israelitas no casarse con personas de las naciones vecinas. Sin embargo, esas instrucciones no se referían a la raza , sino a la idolatría y la corrupción espiritual .
Mira Deuteronomio 7:3-4 (RVR1960) :
“No te casarás con ellas… Porque apartarán a tu hijo de mí y servirán a otros dioses…”
La preocupación de Dios era clara: las naciones extranjeras adoraban dioses falsos. La prohibición no tenía nada que ver con la raza, sino con proteger la fe y la pureza de la relación de Israel con Él . Era espiritual, no étnica.
Hoy, bajo el Nuevo Pacto, Dios todavía desea que los creyentes se casen con otros creyentes (2 Corintios 6:14), pero esa instrucción no tiene nada que ver con la raza , solo con la unidad espiritual en Cristo .
Moisés se casó con una mujer de otra etnia y Dios lo defendió
Uno de los ejemplos más poderosos de matrimonio interracial en la Biblia es el de Moisés y Séfora , una mujer madianita.
Más adelante en Números 12:1 (RV) , Moisés también se casa con una mujer etíope (cusita), y sus hermanos Miriam y Aarón lo critican por ello:
“Y María y Aarón hablaron contra Moisés a causa de la mujer etíope con la cual se había casado; porque él se había casado con una mujer etíope.”
Pero ¿qué hace Dios? Los reprende y castiga a Miriam con lepra (Números 12:9-10). Esto demuestra que Dios desaprueba sus prejuicios , no el matrimonio de Moisés. Si Dios se hubiera opuesto al matrimonio interracial, no habría defendido a Moisés con tanta vehemencia.
En Cristo, todos somos uno
El evangelio derriba todo muro divisorio entre culturas, razas y etnias. En Gálatas 3:28 (RVR1960) , Pablo escribe:
“Ya no hay judío ni griego; no hay esclavo ni libre; no hay varón ni mujer; porque todos vosotros sois uno en Cristo Jesús.”
Cuando dos personas están en Cristo, no hay barrera espiritual entre ellas. El matrimonio interracial entre dos creyentes es perfectamente aceptable a los ojos de Dios. Lo único que importa es que estén unidos en la fe y el amor.
Reflexiones finales: Dios valora la unidad, no la uniformidad
Dios es el Creador de toda nación, lengua y color de piel. Celebra la diversidad. La Biblia nunca prohíbe el matrimonio interracial; de hecho, honra las relaciones cimentadas en la fe, el amor y la obediencia .
Si estás considerando o ya estás en un matrimonio interracial, debes saber esto: no estás en pecado ni estás mal ante los ojos de Dios. Lo que le importa es que lo ames y obedezcas su Palabra.
Toda la Escritura en este artículo está citada de la versión King James (KJV) de la Biblia.
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